ORAAFLEX construye "EL DINOSAURIO DE BELLO MONTE"

EL DINOSAURIO DE BELLO MONTE

EL DINOSAURIO DE BELLO MONTE Por Rosauris Pérez Magallanes
Caracas, debido a su abrupta topografia, tiene como propiedad la de sorprendernos a la vuelta de la ciudad. Sin embargo quedan pocos terrenos vacíos con tan hermosa panorámicas del valle como en que se implanta esta unidad bifamiliar. Es sin duda la única cualidad de este terreno, ya que el verdadero “handicap” radica en resolver una topografia con una brutal pendiente superior al 80%, y una muy difícil implantación. En un terreno de 40 M de fondo solo se contaba con cuatro metros planos; y si eso se le suma la obligación de cumplir con todos los retiros y normas urbanas, da como resultado un diseño de alto grado de dificultad. Para ello se tuvo que idear y planificar un Logística de montaje.

Lo primero que se hizo fue aprovechar el pilotaje de 16 m de profundidad; sobre sus cabezales se creo una plataforma, que al volar dos metros, suma un área plana de unos seis metros. Esta plataforma fue indispensable para que sirviera de mesa de trabajo (almacenamiento, corte apernamiento de la estructura etc.) Ya que los pórticos, que vienen prefabricados de la planta para ahorrar tiempo de ejecución, no podían ser almacenados y manipulados en mitad de la calle Icabarú.


El segundo paso del proceso consistió en levantar los seis pórticos, que conforman el grueso del diseño estructural de la vivienda, gracias a una grúa telescópica. Después se unieron los pórticos, a trabes de vigas apernadas para lograr un arrostramiento entre ellos. En apenas dos semanas se monto la totalidad de las estructura de unos 80.000 kilos.


Tal vez cualquier construcción tradicional hubiera sido sumamente limitada; pero la forma como fue resuelto este diseño, prácticamente en el aire hace aprovechar en un máximo de área, creando espacios en cantiliber, a mas de 25 cm. de altura, y sobre la panorámica de la ciudad. La solución estructural metálica, la cual ya pertenece a la idiosincrasia de la ciudad, fue la acertada alternativa utilizada para estas viviendas. Ella logra fundar en apenas diez pilotes y un muro, dos viviendas que suman unos 700 metros cuadrados de construcción. Lo hace de una forma tan sorprendente, que causo verdadero revuelo en la urbanización, a tal punto que los vecinos paralizaron no menos de 8 veces el proceso constructivo, por pensar que era imposible de realizar o que de alguna forma atentaba las normas urbanas; situación que después de haber sido completamente aclarada, sigue causando sorpresa y asombro a los transeúntes del sitio.

En cuanto a la distribución de interiores, se busco que todos los ambientes vivieran siempre hacia la vista. El nivel de acceso esta ubicada en el piso intermedio, a nivel de la calle Icabarú al abrir la puerta principal, nos recibe un área de doble altura, con una fuente y un jardín interior, los cuales invitan a pasar al recibo y comedor, diferencia a través de desniveles en el piso y efectos de formas e iluminación en el techo. En este nivel, se encuentran ubicados: recibo, comedor, terraza cocina, pantry, cuarto de servicio y estacionamientos. No obstante el verdadero logro es integrar todos estos ambientes al “Cabré” que forma toda la fachada Norte. Desde este piso se accede a las habitaciones.


A nivel de dormitorios se consiguen cuatro amplios cuartos de los cuales el dormitorio principal a través de giros triangulares en la planta se logra: vestier, sanitario, un jacuzzi y una pequeña escalera que sube a un ático; este se convierte en la biblioteca y desde donde se hacen visitables todos los techos de la casa; esto permite otras áreas íntimas tipo terrazas que conforman solarios, jardineras y un jacuzzi al aire libre..


En la planta sótano (donde se almaceno la estructura para su posterior montaje), que se encuentra a unos tres metros sobre la calle Meta, es el área de expansión de las viviendas. En ella se disfrutara de 180º de vista panorámica, mientras sus dueños y visitantes disfrutan de un trago en una barra sobre Caracas
Entre rayas Nº 30 1999


Arq. Rosauris Pérez Magallanes